Tienes numerosas razones para esconderte. La gente se decepcionará de ti; te rechazarán y aver- gonzarán. Seguirás sintiéndote que no eres suficientemente apto. Y a veces, te parecerá que Jesús no hace ninguna diferencia, pero de todos modos acudes a él. Cuando lo haces, es motivo para celebrar. Se te ha dado poder espiritual, lo cual podría inspirarte a pedir todavía más.
Ahora sigue imaginando.
Hambre
Un miembro del personal le dijo a un pastor de una iglesia grande que se rumoreaba entre la congregación sobre algo que él supuestamente había hecho, aunque los rumores no eran verdad.
“Búscalos y tráemelos”. “Detén los chismes antes de que infecten a otros”. Esto es lo primero que uno esperaría oír.
Pero dijo esto: “No saben ni la mitad de las cosas”.
El pastor no había hecho lo que sugerían los rumores, pero conocía su corazón y ya se había asestado acusaciones más graves contra sí mismo.
Los rumores tendrían que ser abordados de alguna manera (y así fue), pero tenemos mucho que aprender de su respuesta inicial.
8 Mile es una película de 2002 de un rapero en ascenso que compite con los mejores. En el clímax de la batalla rapera, se enfrenta con alguien que ha hecho su tarea. Este rival ha reunido información sobre el joven rapero, que había estado anteriormente oculta, y planea usarla para humillarlo, lo cual significaría cierta derrota. El rapero se entera de esto el día antes de un enfrentamiento público.
Esa noche, escribe algunas ideas sobre la letra, y al día siguiente, entra en la lucha. Entonces, hace un rap de su pasado sombrío. Cada detalle. Lo revela todo. Su rival queda sin palabras. Es difícil humillar a alguien que puede reconocer públicamente cosas que estaban escondidas.
Ten confianza
Tu historia es similar.
Hay una tradición en las Escrituras sobre reuniones celestiales en las que Dios pone de manifiesto su justicia. Incluso Satanás se ha presentado cuando este tribunal está en sesión, y su misión ha sido acusar al pueblo de Dios (como lo hizo con Job). Cuando tus pecados son presentados ante el tribunal celestial, Satanás acusa y argumenta para que seas removido… y en un sentido tiene razón. Por ti mismo, no pareces encajar. Pero Jesús dice de inmediato a Satanás: “Jehová te reprenda”. Entonces, te quita tu ropa andrajosa y te viste con vestiduras reales que han sido hechas justo para ti.
Esta escena es tomada de una visión del profeta Zacarías. Cuando Zacarías fue testigo de esa visión, los detalles de cómo Jesús podía defendernos de ese modo eran confusos. Él simplemente sabía que dependíamos de la misericordia de Dios (Zacarías 3). Pero tú sabes que Jesucristo cargó con tu condenación. Por lo tanto, la justicia ha sido satisfecha, y se te invita a vivir de manera libre y auténtica delante de Dios y del mundo.
Nada en las Escrituras alienta la autoconfianza. Este es nuestro problema más que la solución. Pero, sin duda, Dios quiere que tengas gran confianza en lo que ha dicho y hecho por ti.
Puedes depender de Jesús para que se encargue de ti. Te has presentado ante el más elevado de los tribunales y has sido aceptado, amado y completamente vestido. Tras haber estado en ese tribunal más alto, los tribunales más bajos de las opiniones de las personas tienen menos poder.
Cuando le has confesado al Señor tus pecados se- cretos y tus fracasos, las palabras humillantes de las otras personas son menos severas que los asuntos que ya hemos reconocido. Imagina, frente al rechazo, poder pensar: Ni siquiera saben la mitad de las cosas; y, aun así, sin sentirte condenado.
Desde ese lugar seguro en Jesús, considera cómo amar sabiamente.
Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios (Miqueas 6:8).
Te interesas en otra persona. Te enteras de algo difícil o importante en su vida por lo cual puedes orar. Si hubo palabras o acciones hirientes, le pides hablar juntos del tema, o quizá esperes para decir algo mien- tras buscas el consejo de otros.
El amor sabio tiene posibilidades ilimitadas, pero no puedes siquiera ver esas posibilidades sin que Cristo sea tu Roca firme. Solo entonces puedes ver a través de la bruma de las emociones turbulentas.
Estas son solo señuelos de las posibilidades que están por delante. Pero establezcamos esto: el sendero esperanzador en el que estás te eleva como así también te rebaja. Te eleva al ser cubierto con vestiduras reales por Jesús mismo. Te rebaja en el sentido de que hay momentos en los que confías demasiado en otras per- sonas, a fin de que puedas ser aprobado por ellas.
Continuamos apreciando la humildad, en la cual no tenemos que ser algo que no somos. La humildad tiene una comprensión precisa de uno mismo en lugar de idealizada. Es una característica esencial de la libertad que tenemos en Cristo. No tenemos que esconder nuestros currículums inadecuados… y todo currículum lo es. Podemos simplemente reconocer lo obvio. Somos pecadores imperfectos que descansamos en las perfecciones de Jesús, y los que nos critican no saben ni la mitad de las cosas.
Un pequeño libro
A través de 50 devocionales diarios, el consejero Edward T. Welch nos muestra cómo Dios nos habla con dulzura y esperanza, liberándonos de inseguridades y miedos. Revelando verdades bíblicas, nos guía a encontrar aceptación, identidad y seguridad en Dios, superando la vergüenza por la obra redentora de Cristo en la cruz. Una invitación a vivir auténticamente, sin remordimientos.
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